23 mar 2011

Ecos CulTurAr Habana

por José Pomelapocha

Artista y Escritor cubano

“Vuela en Copa Airlines un tango
y se hospeda en el Habana Libre…”
El autor es narrador oral, comediante musical, animador, declamador. Miembro de la Uniónde Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC). Pertenece al Centro Provincial de la Música Adolfo Guzmán. Miembro de la Cátedra Cubana de Narración Oral. Director de Proyecto Ozun. Ha ganado premios en encuentros provinciales y municipales de Talleres Literarios.
Sus textos de poesía infantil, para adultos y narrativas han sido publicados en antologías, y en la revista Alma Mater. Integrante del taller literario Ernest Heminway, algunos de sus poemas han sido musicalizados. Es miembro de la Agencia Cubana de Derecho de Autor Musical (ACDAM) y de La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) de España. Presidente de la Muestra de Narración Oral “12 horas de cuentos en la ciudad de Papier Mache”.

Con los primeros versos del poema “Brindis Inolvidable”, me permito comenzar mi comentario que no es más que el eco de parte de lo sucedido en la capital de los cubanos, ciertos días del mes de noviembre del año pasado. Tuve la dicha de sumarme al evento justo el día que comenzara Cuenta Habana.

Una representación de cuentacuentos argentinos liderados por Claudio Ledesma intercambiaron las experiencias del viejo arte de la palabra con homólogos cubanos. La Casa de la Obra Píala Casa de África y la Casa Simón Bolívar, instituciones culturales enclavadas en el casco histórico dela Habana, atraparon no solo patakies, fábulas y leyendas de la literatura cubana, el Sur de América estuvo muy bien representado. En cada una de sus contadas los visitantes parecían evocar ese clásico de su pentagrama que dice “vení, volá, vení, trai, lai, la larará” ello se demostró con los aplausos, sonrisas, suspiros y reflexiones sustraídas al público asistente, niños felices y adultos agradecidos. Y un momento especial fue cuando cubanos y argentinos decidieron ponerse de pie para abrazar con un cerrado y prolongado aplauso a la señora de los cuentos, la cubana Aidé Arteaga, quién continúa celebrando por estos días sus 95 años de edad y lo hace como todo juglar, contando historias.
Luego un bus, atravesando las bondadosas calles de la Habana, les presentó al Malecón Habanero, desde donde se contempla la Bahía y las fortalezas que defendieron a la ciudad del ataque de corsarios y piratas, y donde un viejo cañón aun sigue regalando su estrepitoso saludo todas las noches a las nueve… y justo a esa hora, parodiando el verso de otro poema del mismo cuaderno: “Reinaron tangos y milongas en noviembre”.
El Salón las Cañitas en el Habana Libre prestó la noche del jueves 26 para dedicar un tiempo al popular baile porteño, claro está, se pudo comprobar que el tango como baile de salón existe en Cuba, y de seguir fortaleciéndose el intercambio entre La Isla del Habano y los artistas puntanos, el tango popular, sin dudas tocará a muchas otras puertas, pues el cubano es romántico, erótico, bien que le gusta vivir (regresando a otro verso) “La sinopsis de una vehemencia”. Demostrado quedó esa noche que muchos se convirtieron en alumnos de las magistrales clases impartidas para aprender la danza del susurro, y donde una joven con el encanto del propio tango y el poder de seducción de un bolero, logró la reverencia del silencio, de los labios de Carolina Cingolani. Una Revista desconocida hasta el momento, regaló su risa y fue atrapada: “Hueney”, tras leerla esa misma noche un cuentacuentos y poeta cubano dijo: “San Luis/ Presta su lluvia/ a las calles de La Habana”.
La mañana del viernes permitió que los amigos visitantes conocieran más que un Hotel Cinco Estrellas, más que el Malecón Habanero, y más que una hermosa playa azul llamada Varadero. Juntos a Elvia Pérez y otros cuenteros visitaron el Municipio Arroyo Naranjo, cuna de José Antonio Méndez, autor de “Novia mía, si me comprendieras” y “La gloria eres tú”. Esta vez los argentinos regalaron su arte en el Museo Municipal La Güinera, y terminaron en el Museo Hurón Azul, otrora casa del afamado pintor Carlos Enríquez.
Y regreso al Habana Libre, creo que la muestra de artistas puntanos es comparable con el encanto de este Hotel, verdaderas joyas de la orfebrería, la escultura, pintura, fotografía, el arte digital, la artesanía y el dibujo. La Señora Paola Irastorza mostró ser una excelente promotora cultural, y regaló a Cuba además, una muestra de literatura bien aceptada de San Luis.
El sábado, interesantes disertaciones de varios países se aportaron a los presentes. Permítome señalar nuevamente al cuentacuentos Claudio Ledesma por su oficio; a la joven Dinah Schonhaut con la defensa de la cultura afro-argentina con “Quilombo”; la uruguaya Matilde Machiavello y su programación neurolingüística, y una amiga argentina nos regaló y educó con sus experiencias en las artes plásticas para con niños marginales. Los cuenteros volvieron a ser noticia con sus presentaciones en el Gran Teatro de La Habana, donde compartieron con otro grande de la contada en Cuba, Octavio Pino.
El Encuentro Internacional de Cultura, Arte y Turismo cerró de manera feliz con una gala en La Casa del A.L.B.A. (Alianza Bolivariana para los Pueblos de nuestra América), entre artistas de la tierra de la caña de azúcar y artistas del Río de la Plata. La historia picante hecha por una mujer jubilada, la historia del maestro de hacedores de cuentos, la convincente voz de Carolina, la muestra de vida del tango como baile, y Paola con su catálogo en mano del Paseo de Arte Independiente, motivaron al poeta cubano cuando dijo: “La fantasía en San Luis/ lleva el mas real de los vestidos”.
Venga la IV edición de CulTurAr-HABANA 2011.
Mi corazón queda mirando al Sur.

“Reinan Tangos y Milongas en Noviembre” es un cuaderno dedicado al pueblo de San Luis y a la Narradora y Promotora Cultural Paola Irastorza, fue ella quién me mostró cuan bella es Argentina, San Luis y Potrero de los Funes. A ella debo conocer tan grandiosos creadores.
José Pomelapoche